[H] Diario de Embarazo by Shad Abadeer S. 👶​ El ángel siendo madre de una luz ❤️

Desde que era estudiante, siempre tuve un sentido protector para proteger a mis seres queridos, y a si mismo, a mis compañeros, tanto mayores como menores que yo. Se potenció ese lado materno protector cuando me contrataron como aprendiz de profesora de Herbologia para cursos Inferiores en el Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Desde entonces, estuve enseñando y cuidando a los menores durante 14 años. Incluso a mis 19 años combatí en una guerra en Hogsmeade para asegurarles un futuro de paz sin guerra a mis seres queridos y a los pequeños. Soy una de las voluntarias para cuidar de los alumnos del Orfanato de Hogsmeade, donando juguetes y recursos, incluido en Dilly The Dragons.

Cuando los niños del orfanato me abrazaron con tanta calidez en aquella navidad, sentí que se despertaba algo en mi interior, el querer ser madre de un futuro mago o bruja que guiaría para utilizar su magia para el bien. El primer paso que realicé fue amadrinar a la pequeña Meghan Barnes, una alumna huérfana para brindarla un cálido hogar y una maravillosa familia con tanto amor y cariño por dar. Ando viendo si puedo adoptarla para que sea mi hija en vez de ahijada.

Me tocaba el vientre en ocasiones, pensando en como sería estar embarazada, mas en un tiempo atrás no tenia ninguna pareja para quedar en ese estado. Hasta que fui voluntaria para ayudar en la elaboración de la receta de la Poción de la Vida. En aquel entonces una chispa de esperanza alimentó aquellas llamas en mi corazón, de querer tener un hijo o hija de mi vientre. No mentiré que me ponía nerviosa la idea, pensando que quizás no era apta para ello. Me infravaloraba hasta que tomé el valor de decir: puedo con esto. Ser primeriza de un embarazo me asusta, pero me esforzaré por brindarle una buena vida de salud y felicidad a mi pequeño o pequeña.

Solicité cita en San Mungo para aquella poción. El jefe Hunter me documentó sobre aquel método, y me proporcionó un documento con los donantes de ADN para emplearlo como segundo ingrediente para la poción. Me dijo que cuidar de un bebé y mantener un embarazo puede ser difícil y ser muy responsable. Asentí a todo. Sabía que no iba a ser del todo fácil, y en el proceso iría aprendiendo a como ser madre. Mientras esté embarazada quizás pueda buscar algún manual para poder documentarme y así prepararme con mas antelación. Quiero ser una buena madre, espero poder serlo. Protegeré a mi niña Meghan y a su nuevo hermano o hermana. Espero que la haga ilusión una vez se entere de la noticia.

El día para tomar la Poción de la Vida llegó. Estaba temblorosa en la recepción de San Mungo esperando a un conocido suyo, Adrien, quien ahora volvía a trabajar en el Hospital San Mungo, sería quien me guiaría y elaboraría la poción para que me la tome. Después de saludarle, le seguí hacia la misma estancia donde estuve con el jefe Hunter, solo que esta vez me guió hasta la zona de las camillas, donde me indicó que me sentara en una de estas. Así lo hice. Le di una muestra de ADN del donante Edmund que habia visto en aquella revista, y después Adrien tomó un pelo mío para incluirlo en aquella poción. Observé como lo agitaba tres veces, hasta que me ofreció el frasco para beberlo. Con mi mano derecha tomé aquel frasco, observando la sustancia, para después beber todo el contenido. Él me indicó que me recostara en la camilla, y me levantara el abrigo para mostrar el vientre, así podría saber si estaba embarazada o no. Mis nervios seguían, mi lado pesimista pensaba que no habría funcionado. Sin embargo, Adrien dió la gran notifica y felicidades por quedar embarazada.

Abrí los ojos con sorpresa, y sonreí de forma contenta y feliz al ver que he quedado embarazada. Me volví a sentar para acariciarme el vientre manteniendo la sonrisa. Siento una gran felicidad de tener una vida desarrollándose en mi interior. Más escuché las advertencias de Adrien. Me advirtió que no debería utilizar mi flujo mágico hasta el parto, ya que de hacerlo, podría afectar al bebé. Tampoco debía ponerme en peligro como llevaba haciendo tiempo atrás para salvar a la comunidad y a mis seres queridos. Asentí, comprendía que ahora estaba más vulnerable y esta vez debía quedarme atrás para no afectar la salud de la nueva vida floreciendo. Prometí que cuidaría a mi pequeño o pequeña, y me mantendría a salvo para que no sufra ningún daño. Así lo haré. Todo por proteger a mi niño o niña. Me preguntó que será, y como se verá...

Cuando nazcas, ¿Estarás feliz de tenerme como tu madre? Incluso en los malos tiempos siempre te cuidaré y protegeré. Espero poder llevar bien el embarazo durante estos meses.

Conforme los días pasaban en los primeros meses de mi embarazo, experimenté nuevas cosas que antes no habría sentado. No al menos de forma regular. Las nauseas, los vómitos, los dolores, como mi cuerpo va cambiando para prepararse a la nueva vida que va a nacer en meses mas adelante. Veo como, conforme pasa el tiempo, mi vientre va creciendo de en poco en poco, desarrollandose con buena salud la nueva vida que está en mi interior. Es una sensación y sentimiento inexplicable, me hace llorar y me hace feliz. En un pasado no pensaba mucho en esta situación, hasta que los niños que estuvieron compartiendo recuerdos conmigo, me enseñaron algo, y me hicieron sentir cosas que antes no sentía. Ser madre.

Sonaría curioso, pero incluso a veces canto canciones o toco música, quizas mi bebé me escuche y le guste este arte maravilloso. O leo cuentos, pensando que me escucha.

Sin darme cuenta, llegó la cita para mi cuarto mes de embarazo. Donde podré conocer el género de mi bebé, y cuantos son. El jefe Hunter fue bastante considerado conmigo para que estuviera lo más cómoda posible y no tuviera complicaciones para sentarme en la camilla para poder examinarme. Estaba nerviosa, por la emoción del momento. Mas deseé con tanta firmeza que todo saliera bien, y mi bebé estuviera con muy buena salud.

Mi padre, Ishikashi, estuvo presente durante la cita. Observando a la distancia como un padre lloroso sonriente. Parecía estar mas sensible que yo incluso. Los lagrimones que le caían parecían grandes cascadas. Imagino que era por el entusiasmo de tener a un futuro nieto o nieta.

Observé con atención a Hunter mientras revisaba mi vientre con aquella poción que conocía visualmente, pues ya la había visto en algunas citas cuando me atendieron heridas o en los chequeos de mi hermano menor Akihiro. Vi como alzó la cabeza con una sonrisa.

-¡Tenemos a una niña!-

Sonreí de forma alegre, aunque no me importaba el género. Niño o niña, iba a quererle igual y cuidarlo con mucho amor. Sin embargo no podía ocultar mi entusiasmo ante la noticia, quizás como toda madre al conocer mas sobre su hija que nacerá ya dentro de 5 meses mas. Mi pequeña y dulce niña, tengo que ir pensando un nombre para ti. Seguro se me ocurre algo bonito para ti.

Después se revisó los latidos del corazón de la niña. Hunter volvió a decirme con una sonrisa que la niña tenia bien el corazón y los latidos. Prácticamente está bien de salud y se desarrolla perfectamente. Algo que me alivia y me llena de felicidad que esté avanzando bien.

Me esforzaré para que sigas bien sana, mi niña. Promesa de madre. Aprenderé y haré todo lo posible para que no te falte de nada y la salud sea abundante, así mismo, tu felicidad.